miércoles, 30 de junio de 2010

Dios en el cerebro

Para los tecnólatras y anti-tecnólatras,
He hallado un libro, por ahí escondido, que puede ser de interés para aquellos que estén interesados en ciencia y en su alcance a los campos filosóficos. La revisión que he hecho del libro es somera, pero parece interesante. The "God" Part of the Brain, por M. Alper, según precisa el autor en el prólogo, es la búsqueda de atisbos experimentales y científicos a aquella necesidad, o aparente necesidad, tan humana de lo "espiritual" y lo "divino". Inicia con una interesante reflexión sobre el establecimiento de un patrón de dios, que el llama "el dios universal" que creo merece atención y reflexión. Libro no apto para dogmáticos, según parece, ni para aquellos que puedan ver como una ofensa la equiparación de dioses con su Dios.

Descargar el libro de Aquí

Joan Caravedo

martes, 22 de junio de 2010

Lista de libros en PDF para descargar

He revisado la lista someramente y veo que hay varias cosas interesantes, bastante de filosofía por lo que he visto. Lo lamentable es que sólo dan título autor y no editorial o nombre de traductor. Sin embargo, podemos encontrar algo útil por ahí. Si alguien revisa y encuentra algo, avise.

La lista está acá:
Lista de libros PDF para descargar

J. Caravedo

lunes, 14 de junio de 2010

Devenir del Ser y filosofía del concepto

Hace unos días, encontré en la web un comentario a la primera parte del prólogo de la Fenomenología del Espíritu de Hegel. El texto está en español, y fue escrito por Simón Royo Hernández, licenciado en Filosofía y, si no me equivoco, ya doctorado. Más allá de las reticencias contra este autor (las cuales, como he constatado, se gestan en foros y blogs) me parece pertinente darle una ojeada a su texto. Dejo al criterio de cada quien, como es natural, la conclusión acerca del comentario.


http://serbal.pntic.mec.es/~cmunoz11/royo29.pdf


Maverick Díaz

sábado, 12 de junio de 2010

Hegel: Comentario al prólogo a la Fenomenología del Espíritu

Les dejo lo siguiente:


La versión Castellana es de Rosa María Núñez. Son cerca de 45 pp. y parece ser un comentario bastante detallado. El texto está extraido de "Hegel and After, Studies in Continental Philosophy Between Kant and Sartre.", del mismo autor.
Espero les sirva.

martes, 1 de junio de 2010

Me Viene, Hay Días, Una Gana Ubérrima...

¿Cómo en un blog de filosofía en general nos atrevemos a colgar ya tres poemas? Sin duda ha de aquejar al observador insidioso aquella pregunta. Mas me limitaré a decir, no usando mis propias palabras, tan limitadas y confusas, sino apoyado en magnos hombros que prestarán algo de solidez en la base a lo que deseo sostener. El texto reza así: "el poeta habla siempre como si el ente fuese expresado y convocado por primera vez. En el poetizar del poeta y en el pensar del pensador se abre siempre tanto espacio cósmico, que, en su interior, una cosa cualquiera, un árbol, una montaña, una casa, el canto de un pájaro, pierden completamente su indiferencia y su carácter habitual" (Heidegger M., Introducción a la Metafísica). Esto lo considero suficiente, no para aquel que tenga un argumento mejor y más bellamente expresado, sino, sin dudas, para aquel cuyo único fin fuera la intromisión vana y obtusa.
Me Viene, Hay Días, Una Gana Ubérrima...

Me viene, hay días, una gana ubérrima, política,
de querer, de besar al cariño en sus dos rostros,
y me viene de lejos un querer
demostrativo, otro querer amar, de grado o fuerza,
al que me odia, al que rasga su papel, al muchachito,
a la que llora por el que lloraba,
al rey del vino, al esclavo del agua,
al que ocultóse en su ira,
al que suda, al que pasa, al que sacude su persona en mi alma.
Y quiero, por lo tanto, acomodarle
al que me habla, su trenza; sus cabellos, al soldado;
su luz, al grande; su grandeza, al chico.
Quiero planchar directamente
un pañuelo al que no puede llorar
y, cuando estoy triste o me duele la dicha,
remendar a los niños y a los genios.

Quiero ayudar al bueno a ser su poquillo de malo
y me urge estar sentado
a la diestra del zurdo, y responder al mundo,
tratando de serle útil en
lo que puedo, y también quiero muchísimo
lavarle al cojo el pie,
y ayudarle a dormir al tuerto próximo.

¡Ah querer, éste, el mío, éste, el mundial,
interhumano y parroquial, proyecto!
Me viene a pelo
desde el cimiento, desde la ingle pública,
y, viniendo de lejos, da ganas de besarle
la bufanda al cantor,
y al que sufre, besarle en su sartén,
al sordo, en su rumor craneano, impávido;
al que me da lo que olvidé en mi seno,
en su Dante, en su Chaplin, en sus hombros.

Quiero, para terminar,
cuando estoy al borde célebre de la violencia
o lleno de pecho el corazón, querría
ayudar a reír al que sonríe,
ponerle un pajarillo al malvado en plena nuca,
cuidar a los enfermos enfadándolos,
comprarle al vendedor,
ayudar a matar al matador ?cosa terrible?
y quisiera yo ser bueno conmigo
en todo.
Poemas Póstumos I, César Vallejo.
J. Caravedo